Me dicen:

“¡El autismo no es discapacidad! ¡Es un proceso distinto de adaptación!  ¿acaso los zurdos somos discapacitados porque la mayoría de las cosas se hicieron pensadas en los diestros?”

Respondo:

Las personas zurdas efectivamente sí experimentan una discapacitación por parte de la sociedad CUANDO SE LES OBLIGA A USAR SU MANO NO DOMINANTE. Esto tiene efectos más allá del esfuerzo, impacta incluso el desarrollo del lenguaje.

Tengo un familiar que en su infancia experimentó una dificultad en el habla similar a la que se describe en “El discurso del rey”. En él fue detectado más tempranamente que su problema de lenguaje venía de que lo estaban obligando a usar la mano derecha.

Antes se creía que ser una persona zurda era un tema de ‘adaptación’ a usar la mano derecha.

Actualmente se sabe que las personas zurdas DEBEN poder usar sin restricción su mano dominante.

Un neurólogo incluso me dijo que como madre debía EXIGIR, no solo que no obliguen a mi hija a usar la derecha, sino que me asegure que use escritorio, tijeras y materiales adaptados para personas zurdas.

De esta manera para que mi hija se desarrollará de la mejor manera posible en un mundo diseñado para los diestros.


Hoy, en nuestra sociedad, las personas zurdas experimentan una menor discapacitación que antes, cuando se les discapacitaba y discriminaba amplia y sistemáticamente.

Aún así, hoy sigue habiendo cierta discapacitación hacia las personas zurdas cuando en los entornos escolares, laborales y sociales no se brindan los #AjustesRazonables que requieren. Es decir, en algunos contextos siguen siendo discapacitadas hoy.

Hace 100 años el ser zurdo sí era una discapacidad bajo los criterios en los que se define hoy la discapacidad, no porque las personas zurdas fueran menos “capaces”, sino porque la sociedad les levantaba más barreras y les negaba ajustes razonables.

De la misma manera, el que hoy nos somentan a adaptarnos para comportarnos de maneras neurotipicas tiene mayores efectos en nuestro desarrollo que los que se perciben superficialmente. No es solo un tema de “adaptación” de nuestra parte.

Quizás en otros 100 años se pueda hablar de que a las personas autistas ya de les dan automáticamente los ajustes razonables que necesitan y por tanto ya dejen de experimentar discapacitación, pero eso está muy lejos de pasar hoy.